5 COMIDAS SALUDABLES QUE TODOS DEBERIAN PREPARAR
1. Una cremosa tostada de aguacate.
Una tostada con aguacate es básicamente lo más fácil de hacer en el mundo, además de que es buena para ti gracias al abundante contenido de Omega-3 del aguacate. Pero tiene un sabor tan exquisito que te sentirás como si estuvieras engañando a la vida cuando te comas una. Por cierto, también es muy elegante.
Una simple tostada de aguacate es solo una tostada (de grano entero, para más fibra y nutrientes) + aguacate (rodajado o hecho puré) + sal marina + pimienta roja. Pero ese es solo el principio ya que puedes agregarle huevo encima o un poco de un buen aceite de oliva. También puedes intentar ésta con aguacate + queso feta +tostada de granada para lograr una dulce y sabrosa combinación. Las opciones son infinitas. Vuélvete loco. Libérate.
2. Avena nutritiva
La avena caliente en una mañana fría es una necesidad de supervivencia invernal. También es una buena forma de permanecer satisfecho hasta el almuerzo y una excelente fuente de fibra soluble, del tipo que ayuda a mantener bajos tus niveles de colesterol. Puedes hacerla en la estufa, en el microondas o en una olla de cocciónlenta. En un clima cálido, puedes hacer avena en la nevera de un día para otro sin mover un dedo. Consigue muchos más consejos útiles sobre la avena aquí.
3. Una ensalada verde que te dejará satisfecho
Si piensas que las ensaladas son para los conejos, aún no has encontrado la correcta. Unos pocos consejos: usa vegetales frescos y considera que cualquier cosa enlatada debería ser un complemento y no el ingrediente principal para que no termines con una ensalada marchita y triste. Si quieres que sea una comida completa, añade un poco de proteína como carne, huevos, frijoles y nueces. Asegúrate de hacer una buena mezcla de ingredientes crujientes tales como repollo crudo, pepino o nueces, y algunos suaves como tomates, verduras cocidas o frijoles.
El paso más importante es hacer tu propio y delicioso aderezo casero (y más saludable). Una sencilla vinagreta de mostaza Dijon siempre funciona, pero también siéntete libre de probar algo más arriesgado. Si estás buscando una receta completa que te inspire, prueba con esta ensalada de col rizada y coles de Bruselas o con estaensalada asiática de pollo.
4. HUMMUS suave
El hummus (puré de garbanzos) es básicamente la comida perfecta pues está lleno de proteínas y fibra. Puedes untar zanahorias o apio con él cuando estés buscando un aperitivo saludable, o untarlo sobre un sándwich en lugar de usar mayonesa. También puedes untarlo en tu dedo y comerlo solo.
Para hacerlo tú mismo, solo coloca unos pocos ingredientes básicos (garbanzos, pasta hecha con semillas de sésamo, ajo, jugo de limón y sal) en la licuadora y procésalos. Consigue aquí la receta para el hummus clásico extra suave, una versión con pimienta roja tostada aquí o bien una receta para una poderosa fuente de proteínas con un hummus con edamame, aquí.
5. Una gran olla de SOPA DE VERDURAS
Cuando hace frío afuera, una gran olla de sopa caliente es literalmente la cosa más bella del mundo. Puedes hacerla solo con verduras o añadir proteínas como pollo ofrijoles. Esta receta se hace en su mayoría con verduras pero usa un poquito de panceta y corteza de parmesano para el sabor.
Pero realmente no necesitas una receta. Solamente puedes picar cualquier verdura que tengas a mano y saltearla en aceite de oliva en una gran olla con el condimento que elijas. (Si estás utilizando pollo, trocéalo y saltéalo primero). Añade una lata de frijoles escurridos y saltea uno o dos minutos más. Añade caldo y llévalo al punto de ebullición. Baja la temperatura para hervir a fuego lento, tápalo y deja que se cocine aproximadamente 20 minutos. Si quieres fideos, cocínalos por separado y añádelos al final. Sírvela en tazones (grandes) y disfrútala.